Oriol
-291015-
-”LA VERSIÓN DE LA REALIDAD 1.5”-
Oriol
Escritor y Terapeuta.
Durante
esta semana, he podido desarrollar más este tema el cual, me hizo ver
directamente una capacidad personal, con la que representar nuestras vidas
fuera de la expresión, que nuestro alrededor representa a través nuestro.
Dentro de los ciclos de desarrollo, hemos de pasar por todas y cada una de las
experiencias, que nos enriquecen a título personal sobre las mancanzas, que
vivimos en nuestras propias existencias. Esto nos muestra los rasgos de la
personalidad, que hemos ido adquiriendo de otras existencias anteriores, y que
se reflejan en esta como aspectos a transformar. Sea por la razón que sea,
venimos de un pasado y actuamos a través de este. No existe forma de
representarlo de otra manera, ya que es así de simple. Todas las experiencias
que vivimos, no son más que una representación de nuestro grado evolutivo, el
cual se refleja a través nuestro para hacernos ver, la intensidad de nuestras
propias experiencias. Como bien cite en anteriores artículos, nuestra
personalidad es la manifestación de nuestra identidad, como seres humanos aquí
en la Tierra. Esta se representa a sí misma, por estar en equilibrio y durante
este equilibrio hacernos reconocer, el grado o nivel en el cual atravesamos
nuestro aprendizaje. Cada personalidad, refleja sus experiencias dentro de las
propias ondas de expansión, que actúan en nuestros campos electromagnéticos.
Esto nos hace contemplar “la versión de la realidad 1.5” que más
se acerca a cada uno. En ningún caso existe la realidad absoluta, más bien se
reflejan distintas realidades con las que, actuar y reconocer nuestro propio
proceso evolutivo.
De
esta forma, podemos contemplar como tal vez en la actualidad, tenemos muy claro
algunos de los aspectos de nuestras vidas, los cuales van a cambiar en un
tiempo más cercano. Nuestras mentes, los vehículos a través de los cuales se
refleja, nuestra consciencia están en constante transformación y tan solo son
aspectos de la densidad que nos representa, los que nos hacen vivir sumergidos,
en actitudes de una personalidad inferior. Durante nuestro aprendizaje,
experimentamos las primeras esferas de desarrollo del ego. Estas pueden durar
varias encarnaciones, y aun así se pueden reflejar actitudes de esta manifestación,
cuando hemos atravesado esas esferas de las que os hablo. Durante mi
trayectoria, he podido reconocer como es más fácil, que vuelva algo del pasado
a nuestras experiencias, que no concentrarnos en sentirnos en el presente. Por
las razones que sean, todos arrastramos aspectos o amarres del pasado, que nos
impiden avanzar con seguridad y firmeza. Estos actúan de tal forma en nosotros,
que se adhieren a nuestra personalidad la cual en muchos casos, nos hace creer
que estamos enfermos. Si damos la posibilidad a nuestros egos inferiores, de actúan
a través nuestro tan solo danzaremos, en una constante espiral de
posibilidades, que se representa de forma horizontal ante nuestros ojos. En
estas últimas consultas, he podido comprobar como las personas que asistían me
citaban que no veían una salida su situación,
ya que vivían sumergidas en estas durante tanto tiempo que no eran, capaces de
ver como trascender esa auto limitación.
Después
de una explicación más exacta, pude hacerles ver que estas retroalimentaban su
miedo, además de su inseguridad a cambiar nada de lo que las rodeaba. En
realidad no se trata de cambiar lo que nos rodea, sino de cambiar a sí mismos y
reconocer que no formamos parte, de un bucle constante en el que navegar. Para
todos esos egos inferiores, los cuales buscan respuestas a sus propios miedos
sumergidos, en esas esferas de realidad, tan solo es necesario cambiar vuestra vibración
y no tocar absolutamente nada de lo que os rodea, ya que esto cambiara por sí
solo. En este caso puedo hablar de la personalidad la cual se ve sumida, en una
experiencia representada bajo las fuerza del ego inferior, cuando está a medida
que comprende y asume sus posibilidades se adentra en la adaptación, de un
ciclo más personal de desarrollo a través del cual todo lo exterior, no es más
que una pantalla en la cual cada uno de nosotros, colocamos los iconos de
nuestra propia representación. Como arquitectos de nuestras propias
experiencias, hemos de ser capaces de dirigir nosotros mismos nuestra obra,
sino es así tan solo viviremos anclados a una realidad, que nos consume
deliberadamente por el exterior el cual, tan solo refleja una versión inferior
de sí mismos. Ya cite en anteriores artículos que las respuestas no están
fuera, sino que todas las respuestas están en nuestro interior esperando ser
reconocidas, una vez nuestra identidad más elevada se hace cargo, de nuestra
personalidad como seres humanos en la Tierra.
Oriol,
gracias por su lectura y difusión.
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