miércoles, 6 de abril de 2016

EL ALMA, DE LO MAS DENSO A LO SUTIL - 06 - 04 - 16

                                                                        




Oriol -060416-


                                     -EL ALMA: DE LO MAS DENSO, A LO SUTIL-



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Oriol, Escritor y Terapeuta.



Mientras me preguntó de qué forma, comprender la trayectoria de un Alma, me vienen a la cabeza distintas secuencias, las cuales procesar a través de dicha pregunta. Entre tanto, mi propia forma de ver las cosas, me hace caer en la cuenta de que el Alma eterna, y para constatar dicho proceso, me tendría que remontar a nivel mental a través del desarrollo de este. Hemos aprendido a día de hoy, que nuestra trayectoria aquí en la Tierra se representa, a través del mental con el cual operamos. Este refleja los diversos niveles, a través de los cuales nos adentramos, en esa fase de desarrollo que podríamos llamar “despertar”.

De esta manera, sí que podemos representar al Alma en este artículo, a través de esa parte de nosotros que procesa y actúa, en pros de las lecciones y tareas que veamos a cumplir, dentro de este vehículo físico al que llamamos cuerpo. Antes de reencarnar el Alma para muchos Espíritu o Esencia se encarga de trazar, todas las líneas desde una óptica muy desarrollada, la cual actúa a través de un mental de unicidad. Este actúa a través del proceso de crecimiento necesario, para cada uno y de esta forma, se elige todo lo que compromete a esta Alma a vivir esa experiencia física, en la Tierra con esas otras Almas que formarán su camino de aprendizaje.

¿Hasta aquí bien? Una vez esas líneas están trazadas y reconocidas por cada uno, (desde un nivel más desarrollado al mental 3-D) bajamos de esas esferas más desarrolladas para, introducirnos dentro de ese cuerpo físico. Lo más hermoso de todo esto, es la experiencia que vivimos dentro de la forma física. Aquí en ese lugar el cual nosotros elegimos, (no existe el error de elección en ninguna de nuestras experiencias), se van desarrollando esos propósitos que nuestra Alma eligió con el único inconveniente, el cual representa un aumento considerable de nuestra densidad a nivel físico.

En ese momento nos encontramos dentro de un cuerpo físico a través del cual, vamos perdiendo la conexión con el Alma a través de la densidad, de nuestro mental. Este desarrolla en nosotros, nuestra personalidad y con esta toda clase de caracteres los cuales, vamos puliendo vida tras vida. Hemos de tener una cosa directamente clara, nuestra Alma sigue en nuestro interior y no la perdemos. Por el contrario, esta se ve afectada por capas y capas de densidad, que representan a nuestro mental no desarrollado que pasa, a ocupar una segunda fila en nuestras existencias.

A medida que tomamos consciencia de esto, nos adentramos en experimentar esas capas las cuales miramos de transmutar adquiriendo conocimiento de lo que, nos sucede y de qué forma cambiarlo. En primer lugar, reconócenos a ese ego no desarrollado el cual, ha sido el portador durante numerosas encarnaciones, de hacernos vivir bajo su reinado. Durante estas existencias, de desarrollo necesario para cada mente, una vez abandonábamos nuestros cuerpos o vehículos físicos, volvíamos de nuevo a sentir la fragancia del Alma la cual, en ningún momento se aleja de cada uno.

Aun así, en esa etapa de depuración de densidad mental nos adentramos, en experimentar constantemente, algunas de las energías del Alma las cuales actúan a través nuestro, aún representados por esa densidad. A estas les llamó Dones o Habilidades, y forman parte directa del propósito de nuestras vidas. A medida que la conexión con el Alma es más nítida, más desarrolladas están a través nuestro estas habilidades. A menor sensación de liberar esa densidad, más nos cuesta reconocer cada una de estas a través nuestro.

Os expongo esto para que realmente, entendáis de qué forma se lleva a cabo este, precioso entramado que refleja la existencia del Ser, en todas sus formas. Aún que esto, os parezca difícil de comprender dentro, de la versión más mental de vuestras experiencias, raro tiempo para ello y seréis capaces, de adentraros en estas cómo si nada pasase. Todo es cuestión de integración y a través de esta, de reconocimiento de los diversos niveles que componen al Espíritu a través de la forma. Como sabéis el Alma refleja la pureza y esta, la alegría y el bienestar en todas sus acciones.

El Alma además no se reconoce dentro de un conocimiento, más bien se representa a través de la Sabiduría interna, que no tan sólo representa el bagaje de esta en su eternidad, sino que ofrece la extensión de cada uno de los reinos a lis que pertenece, para unificar los conocimientos en esa versión, de la unicidad de los Reinos Sagrados. Espero que hayáis disfrutado de su lectura.



Oriol, gracias por su lectura y difusión.

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