Oriol 11-09-16
-EL MENTAL ES LA PARTE CENTRAL, O ECUADOR-
Oriol, Escritor y Terapeuta.
Hoy me propongo explorar los confines, de las estrellas que nos representan y plasmarlo, en nuestras propias experiencias como seres humanos, trazando una linea de auto realización a través de la cual, la propia expresión del Espíritu traza su propio recorrido, en las constantes de una personalidad que refleja el inicio, para atravesar el eje de rotación e restablece el origen del ego, para nuestro propio desarrollo e evolución. Hemos de hacernos participes, todos y cada uno de nosotros, de las constantes manifestaciones que afloran de cada uno de nosotros, una vez adoptamos el comportamiento real, al experimentar la impresión de lo sagrado, a través de la cual el mental se manifiesta, en alineación con nuestras propias experiencias, de aprendizaje y adaptación. Esta impresión nos unifica, a la impresión mas elevada desde la cual, su propia emanación se constituye a través del Alma, dando un sentido original al mental, el cual se alinea con la personalidad primaria, y el ego des armonizado mientras encuentra su profunda sensación, de alinearse con su elíptica celestial a nivel, del universo local en el que experimentamos, nuestra propia evolución e desarrollo dentro, de los vehículos físicos que nos representan.
El mental es la parte central o ecuador, dentro de la cual la experiencia se desarrolla, en total manifestación con el Alma y el Espíritu, como seres humanos.
Al representar la parte central, volvemos a restablecer el orden implicado, de los dos ejes que constituyen la polaridad, tan solo desde el reflejo de la perspectiva local, la cual manifiesta la personalidad humana en su expresión, de contemplar el exterior y emitir sus propias expresiones, fuera de todo conocimiento e sabiduría a nivel mental. Esta se refleja en una constante polaridad, dentro de una versión limitada de tiempo, la cual establece que los enlaces a nivel dimensional, tan solo constituyan una parte de si mismos, para nuestra propia auto realización. El siguiente paso a dar, es la sensación de proyectar en plena seguridad dentro del sistema mental de referencia, en el cual se manifiestan todas y cada una, de las constantes vitales que exponen, a que seamos capaces de desarrollar todo ese potencial, que espera ser reconocido para entregarlo como una fuente de luz, aquí con nuestros hermanos y hermanas en la Tierra. Nuestra principal misión, es la de levantar los Velos del mental inferior, y reflejar a través de las mayores actitudes, todas y cada una de esas herramientas, las cuales representan la manifestación del Alma a través, de cada uno.
Hemos aprendido, que el Alma es la mayor aproximación a esa parte sagrada de cada uno, ahora es el momento de procesar que esta, eleve por encima de nuestras posibilidades, los caracteres oscuros de nuestras personalidades humanas, haciendo danzar nuestras experiencias físicas, en una constante de armonía y cooperación.
Las secuencias de oscuridad, tan solo son armónicos de energía desplazados de su eje de rotación, para hacernos integrar los matices a través de los cuales, las elípticas vibratorias de nuestros campos electromagnéticos, toman una dirección en la que, restablecer la alineación de las energías a nivel planetario. Si contemplamos los ciclos de desarrollo, a nivel de las esferas mas elevadas nos adentramos en la expresión, de que todo movimiento o rotación constituye, esa parte de si mismos que favorece notablemente la intención del Alma, en su compromiso a nivel estelar. Mientras el mental racional, busca sucesos bajo matices auto gestionados, por este mismo debido a su poca percepción de la realidad, las mismas energías representan en cada uno de nosotros, esos armónicos de energía desplazados, para que seamos capaces de ponerlos de nuevo, en alineación con su propia adaptación de los ciclos a los que, realmente pertenecemos. Los constantes espejos a través de los cuales, se representan nuestras propias actitudes tan solo constituyen, esa parte de si mismos que hemos de representar, a través de su iluminación personal, en alineación con las elípticas vibratorias, de nuestra experiencia mental, aquí en la Tierra.
Oriol, gracias por su lectura y difusión.
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