Oriol -300715-
-¿QUE OS
MUESTRAN, VUESTROS CORAZONES?-
Mientras los
arquetipos mentales inferiores, interactúan en nuestra versión inferior, como
os cite en artículos anteriores, el Alma se aleja de nosotros al no recibir las
influencias de una estructura sólida, en la que operar.
Todo está en su preciso lugar, en el momento adecuado
A medida que
avanzamos, en el camino de tomar consciencia de nosotros mismos, se reflejan en
nuestras propias experiencias, extractos de dualidad que actúan, haciéndonos
participes de aspectos o situaciones, en las cuales las influencias del grado
mental, que expresemos hacia el exterior, actuaran como condicionantes de una
identidad, la cual se ciñe al ciclo evolutivo, de nuestras propias mentes
humana. La célebre fase, “todo está en su preciso lugar, en el momento
adecuado”, nos muestra una clara versión de la graduación de cada uno, la cual
es lleva a cabo mientras, los patrones de tiempo se integran, en la transformación
de una versión más elevada, de nosotros mismos. No podemos trascender los
grados o niveles, que conciernen a nuestras experiencias, ya que estos
configuran, parte notable de los sistemas que actúan, como sistemas
multidimensionales de adaptación, al reconocimiento de una base racional, de
nuestras experiencias. La mente humana, sigue cayendo en sus propios errores,
los cuales, se ciñen a un plan perfecto del ego, el cual se representa a sí
mismo, por encontrar salidas rápidas a los problemas, que el Alma nos muestra.
Este opera directamente, en la cuadricula de una versión lineal, la cual se
refleja como una versión reducida, de una constante de tiempo que trasciende,
los arquetipos del Yo Superior o Consciencia del Todo. Esta cuadricula es
representada, como una versión holográfica a través de la cual, nuestras
secuencias mentales quedan almacenadas, en la red telúrica inferior, de la que
os hable en artículos anteriores. Todo proceso de reconocimiento, de uno mismos
se establece en los aspectos más sublimes, que la propia Alma elige para
nosotros, una vez su vertiente de energía se refleja directamente, desde la
pureza de nuestros propios corazones.
La minúscula
versión de nosotros mismos
El
sentimiento de crear, dentro de una estructura tan lineal, tan solo nos aporta
seguridad una vez, los arquetipos que nos representan, se nutren de esas energías
que constituyen al ego, en su mejor versión de sí mismo. Este puede ser
diseñado, por una versión más elevada de nosotros, la cual no se representa
bajo una versión inferior, en la cual este asume sus propios aspectos de transformación,
en la transición de aprendizaje dimensional. Una versión superior, o más
elevada de la constitución de una mente lineal, no se ciñe a una percepción
horizontal de tiempo, ya que se establece a través de una realidad sumida, en
el absoluto el cual se refleja a sí mismo, en una versión de la totalidad sin
aspectos geométricos, donde estructurar nuestras percepciones. Esto nos
demuestra, la minúscula versión de nuestras identidades, las cuales juegan sus
partidas, en una versión que las mentes más desarrolladas, son capaces de
percibir el final, de tales acciones. Mientras aquí, en esta versión racional
de los actos, todo está reflejado y acuñado, para hacernos sentir bien, los
estados más elevados en los que podemos actuar, se reflejan a sí mismos como
una versión natural, de todos los aspectos que se ciñen, a ser vividos desde el
corazón. Una versión inferior, se ciñe a experimentar a través de los sentidos,
los cuales nos hacen creer los portadores, de una realidad representada por
nosotros mismos. Es tan infantil esta versión, que las estructuras de vuestras
mentes se debilitan, al no actuar de acuerdo a lo que realmente, vuestros
corazones o muestran. ¿Qué os muestran vuestros corazones?, libertar,
conocimiento y seguridad en vuestras acciones. Para reconocer, estas tres energías
en primer lugar, tenéis que comprender-las dando lugar a que su comprensión, se
abra paso a reflotar los aspectos, más elevados basados en el ahora. Muchas
mentes, me comentan que es imposible vivir esos aspectos o energías, en esta dimensión
de tiempo.
Una
experiencia de auto gestión, de la realidad
Cuando el
problema no es la dimensión de tiempo, sino la implicación que estas personas a
mostrado, a su representación de la realidad. Sin consciencia, o conocimiento
actuamos en un tablero de juego, en el cual no se nos entregan las
instrucciones. Esto nos hace vivir sumidos, en una experiencia de auto gestión
de la realidad, la cual sí que nos muestran atrayendo nuestras mentes, a verse
inversas en actitudes exteriores, las cuales retro alimentan constantemente,
nuestras propias experiencias. Tan solo, mirar vuestras propias vidas y
valorar, las tres energías anteriores, a ver si las cumplís con total
integridad. Tal vez alguna de ellas, sometida a los aspectos del ego, el cual
os auto gestiona como a este le da la gana, haciendo participes de una versión
inferior, en la que navegar buscando respuestas, a vuestras propias preguntas.
Todos los aspectos, donde nuestras experiencias se lleven a cabo, de forma rápida
nos representan atributos, que conciernen a actuar directamente, en las
experiencias más humanas. Las energías del Alma, no se ciñen a ninguna versión
de tiempo, ya que actúan a través de fuerzas elementales, las cuales nos apoyan
en la constitución, del sentirse en plenitud una vez las esferas del ego, han
sido re alineadas. Las esferas del ego, constituyen una profunda reflexión, en
la extensión de los enlaces, que actúan como procesos de crecimiento, a medida
que avanzamos en el despertar, de nuestras propias identidades. Esto es tan
real, como que nos representan los vehículos superiores, los cuales interactúan
directamente en nuestras vidas, a medida que estos se alinean por encima de la
densidad, que nubla nuestras mentes racionales. Esta extensa dirección, la cual
actúa en nuestros propios prismas de realidad, se representa en los ciclos a través
de los cuales, nuestras versiones de sí mismos, son de muy baja densidad, ya
que tan solo refleja actitudes muy por debajo, de lo que somos capaces de
experimentar, una vez las vertientes del Alma, se ciñen a los planes maestros.
Las estructuras del sistema, en el que nos vemos inversos, caen por su propio
peso al ponernos pruebas, las cuales hemos de percibir una vez, somos capaces
de trascender el sistema, que se refleja bajo las experiencias de nuestro,
propio crecimiento como humanos.
Oriol,
gracias por su lectura y difusión.
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